Sin conocerte llegaste y me invadiste,
Ni Napoleón tuvo tan gran osadía,
Sin importar nada mi reino gobernaste,
De norte a sur me conquistaste,
Sin remordimiento de todo te adueñaste,
Y sin perder nada de la misma forma te marchaste,
Y sin preguntarme me dejaste,
Con una cólera asfixiante,
Este dolor estrangulante,
Y un insomnio donde pensarte.
Comments